Sobre la Vida y la Muerte.
Lisette Pons
No cabe duda de que la fotografía si parece preparada para algo lo está
para la analogía y, sin embargo, la expresión de los sentimientos a través de
metáforas visuales ha sido una constante a lo largo de su historia.
Pensemos en Alfred Siteglitz que defendía que sus fotografías podían ser
equivalentes metafóricos de sus sentimientos más profundos: “My cloud
photographs, my Songs of the Sky, are
equivalents of my life experience. All
of my photographs are equivalents of my basic philosophy of life. All art is
but a picture of certain basic relationships; an equivalent of the artist’s
most profound experience of life”[1].
Tal como, años más tarde,
Rosalind Krauss[2]
señaló, nos encontramos aquí ante un simbolismo entendido como comprensión del
lenguaje en tanto que forma de ausencia radical: las palabras y los objetos
suplantados por la presencia del signo.
Observando las fotografías de Lisette, recuerdo las de un gran amigo y
fotógrafo, Humberto Rivas, en especial las fotografías que realizó de flores
marchitas, entre ellas algunas calas, metáforas que en lo efímero mostraban “la
huella de algo sido o la premonición de algo por venir”[3].
Tal como señala Nelly Schnaith quien mejor que nadie ha entrevisto el valor de
la metáfora en el arte ha sido Nietzsche : “ahí es donde el ser humano se
despoja de sus corazas conceptuales, de toda categorización rígida de la
realidad y se entrega al instinto de metáfora para aparear lo distante o
separar lo afín […] La metáfora nos reconduce a una relación primigenia con la
realidad en la que todavía inventábamos para conocer”[4].
La práctica artesanal que reflejan las imágenes de Lisette nos habla de
tiempos lentos, pausados, de reflexión, lejos de la instantaneidad de la imagen
fotográfica cazada al vuelo y del acto mecánico. Autorretrato de los
sentimientos, expresados a través de fotografías que nos recuerdan el propio
proceso de revelado de las imágenes, cuando en la penumbra del laboratorio
empiezan a surgir, a conformarse lentamente sobre la superficie del papel.
Imágenes que nacen y poco a poco se van materializando, pero en el caso del
trabajo de Lisette al alcanzar la plenitud parecen volver a disolverse. Me
gusta como transitan de la oscuridad a la luz, de lo incorpóreo a lo material,
como el motivo se forma y se diluye, dejando una huella indeleble en nuestra
memoria.
No hay duda de que el lirismo y la sensibilidad que encierra esta serie
de fotografías no dejarán a ningún espectador indiferente.
Cristina Zelich
Salamanca, mayo 2013.
[1] En Dorothy Norman, Alfred
Stieglitz: A Talk (Center for Creative Photography), Tucson, AZ :
University of Arizona Press, 1976.
[2] Rosalind Krauss, “Stieglitz/Equivalents” en October, vol.11, The MIT Press, 1979, pp. 129-140.
[3] Nelly Schnaith, “Un clasisicismo propio” en
Humberto Rivas. Los Misterios de la Realidad, Lunwerg, Barcelona, 1999.
[4] Ídem.
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